Comercio garantiza la seguridad de las compras en una videoconferencia de fremm
La directora general de Comercio e Innovación Empresarial intervino en una videoconferencia en donde también participaron representantes de Ibermutuamur, quienes recordaron que se afronta una situación de salud pública.
La apertura de comercios y establecimientos en la primera fase de desescalada está siendo acompañada de la implantación de las medidas de seguridad sanitaria pertinentes, según se expuso durante una videoconferencia organizada por la Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia (FREMM). En la webinar se recordó que las empresas se exponen a recargos entre el 30% y el 50% en todas las prestaciones que cobre el trabajador en caso de negligencias en medidas de seguridad sanitaria contra el Covid-19 e, incluso, podría llegarse al cierre del negocio.
La jornada virtual de ayer se centró en el comercio. Para ello, se contó con la directora general de Comercio e Innovación Empresarial, María José Ros Olivo, quien comentó que los comercios se enfrentan a las fases con mucha incertidumbre, incluso, muchos de ellos, horas antes de abrir los negocios, desconocían las medidas higiénico-sanitarias que deben llevar a cabo.
“Debemos volver al comercio tradicional pues los comerciantes de la Región se están esforzando muchísimo y puede hacerse las compras con toda la seguridad en los establecimientos” informó Ros Olivo.
Movilidad regional
Entre los asistentes a la videoconferencia estuvieron empresarios de comercios minoristas del metal, quienes podrán desplazarse por la Región durante la primera fase de desescala para hacer servicios de reparaciones, según el Boletín Oficial del Estado.
La apertura de concesionarios e ITVs con cita previa también está permitida, aunque superen los 400 metros. Mientras que ya no es preciso solicitar cita previa para acudir a comercios minoristas, servicios de asistencia técnica y talleres de reparación.
Ámbito laboral
Durante la webinar también se trató sobre trabajadores especialmente sensibles y la prestación de incapacidad laboral (IT).
Así, los expertos de la mutua Ibermutuamur participantes informaron que en estos momentos se afronta una situación de salud pública, no de riesgos laborales. Es por eso, que los facultativos de atención primaria son quienes dan las bajas con el concepto de enfermedad común, si bien se cobran como accidente de trabajo.
Esta consideración implica una flexibilidad de mejora desde la Seguridad Social para empresas y empleados, además de reducir los requisitos para su cobro.
“En circunstancias normales, la empresa asume los primeros 15 días de la baja laboral. Ahora, por la Covid-19, en nuestra mutua nos ocupamos de la prestación desde el primer día y abonamos el 75% de la base reguladora”, indicó José Alemán, director de Prestaciones de Ibermutuamur.
Alemán también resaltó que el Instituto Nacional de la Seguridad Social dispone de un servicio de información diaria sobre las variaciones de las prestaciones de la Seguridad Social de sus empleados.
Respecto a los trabajadores con especial sensibilidad al virus, se recordó que su puesto de trabajo debe adaptarse, para evitar riesgos y, en caso de inseguridad, contar con la baja médica.
Las empresas deberán adoptar todas las medidas de seguridad y disponer de los de equipos de protección individual procedentes. De lo contrario, en caso de contagio, se exponen a recargos entre el 30% y el 50% en todas las prestaciones que cobre el trabajador y podría cerrarse hasta el negocio.
El directivo también recordó que los trabajadores de baja con anterioridad a la implantación de un ERTE, no está afectado por el mismo. Si bien, indicó que su mutua asume también la IT, “si la empresa tiene menos de 50 empleados y se ha acogido a un ERTE de fuerza mayor, debiendo presentar la documentación pertinente con posterioridad”.
